Mascaradas

Desde el obsceno basar de vanidades
que oculta tras de si la podredumbre,
se horrorizan algunas pobres gentes
al ver la gente pobre y su derrumbe.


No quieren ver acaso el componente
de ser ellos los motores de esa burla.
Burla de creer ser *la buena gente*
desde la vil mascarada en que se excusan,
pero no arriesgarán ni un solo diente
de los excesos de vida en que pululan. .


De maquillaje, de falsedad, palabras huecas,
suman por doquier falsas conciencias.
De todo aquello que se pone en evidencia
cuando un tema central se hace presente
y priorizan su mundo de quimeras
al dolor, al desgarro y a lo urgente.


Personas de cartón, de falsa esencia,
que llevan el vacío por delante,
y en nada alivian su dolor constante
de buscar en lo falso a sus simientes.


Pero crece más allá de la apariencia
un clamor de silencios rebelados,
nace un sentimiento renovado
que grita a viva voz, de esquina a esquina,
que no hay valor que sobre el hombre exista,
ni otro camino a recorrer que Honrar la Vida